Formó parte de los militares que derrocaron al entonces presidente Arnulfo Arias Madrid el 11 de octubre de 1968. El verdadero líder de la revolución era Boris Martínez, sin embargo el gobierno norteamericano no veía con buenos ojos a este militar, haciéndole a un lado y dandole apoyo a Torrijos, con más carisma y liderazgo frente al pueblo (en verdad, Boris Martínez tenía ante el pueblo una imagen de militar duro en la medida en que en el sector castrense era admirado por su disciplina, honestidad y don de mando). Torrijos logró exiliar a Martínez en 1969, enviándole a Miami, La Florida, entre otras cosas porque alentaba profunda animosidad contra la clase oligárquica del país, los comunistas y los contrabandistas y defraudadores del fisco panameño. Tal vez en algo influyó el hecho de que Torrijos, siendo capitán, fue incapaz de sofocar la revuelta estudiantil en Cerro Tute, Veraguas, en las postrimerías de la década del 50, al extremo de ser herido de perdigones por la espalda, y el comandante Bolívar Vallarino, que le tenía como su protegido, se vio obligado a enviar al área al también capitán Boris Martínez, quien sofocó el levantamiento en armas con el saldo de muerte del dirigente estudiantil Eduardo Santos Blanco y otros.
Obtiene el título de Subteniente de Infantería y bachiller en Ciencias y Letras, gracias a una beca, en la Academia Militar "Capitán General Gerardo Barrios", de El Salvador.
Hacia 1952 se enlistó en la entonces Guardia Nacional de Panamá y en 1966 es ascendido a Teniente Coronel. En octubre de 1968 se lleva a cabo un golpe militar al gobierno del Dr. Arnulfo Arias Madrid, electo democráticamente, pero con tendencias dictatoriales y de pretensiones oligárquicas, pese a que no era de clase alta. El Dr. Arias Madrid, se rumoraba en la época, era racista, y llevó a cabo campañas de esterilización en las comunidades de gente de color e incluso se identificaba con Hitler, a quien admiraba desde sus días de estudiante en Alemania.
Torrijos se autoascendió a Comandante en Jefe de la Guardia Nacional y exiló al Dr. Arias Madrid (no es cierto, el Dr. Arnulfo Arias se autoexilió voluntariamente en la Zona del Canal tras enterarse, en el Teatro Lux, de la capital panameña, de que los militares le habían depuesto y luego viajó a Estados Unidos, radicándose en el sur de La Florida. Después volvió a ¨Panamá casado con Mireya Moscoso, que había sido su dama de compañía en virtud de su edad y deterioro de salud. En su finca cafetalera Arco Iris, en la provincia de Chiriquí, se reunió varias veces con representantes del régimen militar que le derrocó, como los entonces tenientes coroneles Rubén Darío Paredes y Manuel Antonio Noriega. Murió en los Estados Unidos).
Torrijos encabezó el llamado "movimiento revolucionario", que implementó en 1972, las reglamentaciones de los trabajadores el Código de Trabajo e incluso una nueva Constitución Nacional, sustituyendo la de 1946. Torrijos fundo el Partido Revolucionario Democrático (PRD), a imagen y semejanza del colectivo dominicano del mismo nombre con ayuda del Dr. José Francisco Peña Gómez, conocido político quisqueyano.
Torrijos nombró una Asamblea de Representantes de Corregimientos que sustituyó a la Asamblea Nacional.
Su gobierno se carcaterizó por ayudar a las clases humildes y realizó un completo plan de construcción de carreteras y puentes, llegándose a usar el equipo pesado de la Subjefatura del G-5 (Acción Cívica) para abrir en provincia caminos de penetración y que los campesinos pudiesen llevar al mercado sus productos, así como se construyeron numerosas escuelas y centros de salud en todo el país. En éste período se levantó el aeropuerto Internacional de Tocúmen (no es cierto, la terminal existía con ese nombre desde mucho antes del 11 de octubre de 1968), el Centro de Convenciones Atlapa (Atlántico Pacífico), el Ministerio de la Vivienda y el Banco Hipotecario Nacional al igual que el Instituto Nacional de Cultura (INAC), el de Deportes (INDE), el de Formación y Aprovechamiento de los Recursos Humanos (IFAHRU), el de Habilitación Especial (IPHE), el de telecomunicaciones (INTEL), el de Mercadeo Agropecuario (IMA), y otros.
Torrijos tuvo la iniciativa de crear la Universidad Nacional de Panamá (no es cierto, la impulsó en la década del 30 el Dr. Octavio Méndez Pereira, quien fue su primer Rector, y los militares clausuraron dicha casa de estudios superiores por dos años para que la izquierda militante no tuviera dónde congregarse para conspirar u organizar protestas contra los cuarteles), lo que le dio acceso a las clases humildes (mestizos, indios y negros) a la educación superior, hasta el momento exclusiva para los contados grupos de clases privilegiadas (blancos, oligarquía criolla). La educación se convirtió en herramienta de superación para la gente pobre (eso fue después de los dos años de cierre, cuando Torrijos empezó a dialogar con todos los sectores en pos de apoyo para la lucha por la soberanía en la Zona del Canal y tras convencer al Estado Mayor de que no era prudente construir un cuartel frente a la Universidad, en los predios donde funcionó por muchos años el Instituto Cartográfico "Tommy" Guardia, en Veranillo Viejo).
A nivel social y humanitario uno de las mayores triunfos fue que creció la expectativa de vida y disminuyó la mortalidad infantil. En videos de la época se registra el caso de un niño en un hospital rural, muy lejano a la ciudad capital, con un brazo vendado, el camarógrafo que ayudaba en el reportaje sobre la pobreza, para no dramatizar, creyendo que la herida se debía a un golpe u otro, evitó tomar la herida vendada. Al preguntar a los médicos sobre la herida, se les explicó que debido al hambre el niño se había alimentado de su propio brazo (ese presunto video jamás se divulgó en la televisión panameña, por lo que es dudosa su legitimidad).
Torrijos se identificaba con los pobres y para ayudarles se realizó la "Reforma Agraria" y regaló más de 10 mil títulos de propiedad, de los terratenientes, se formaron más de 200 asentamientos campesinos y 61 juntas agrarias (las tierras que regaló fueron expropiadas, como lo dio a conocer en reiteradas ocasiones uno de los más afectados, el señor Manuel María Aguilera "Manongo", de Antón, provincia de Coclé, fundador de la Asociación Nacional de Ganaderos (ANAGAN), a quien Torrijos ofreció infructuosamente una embajada para desagraviarle).
La parte oscura de el dominio de Torrijos son las desapariciones de sus opositores, entre ellos el sacerdote colombiano Héctor Gallego, desaparecido en 1971 en Santa Fe, provincia de Veraguas, y cuyos restos aún hoy se siguen buscando. Durante la represión del dictador Torrijos se dieron incontables torturas, desapariciones y violación de derechos humanos, pero debe decirse que el régimen enfrentó una guerra de guerrillas que costó muchas vidas en las filas uniformadas y rebeldes que seguían como líder principal al uruguayo Walter Sardiñas, ex-miembro del grupo revolucionario Tupamaros, y al chiricano Ariosto González, entre otros que combatieron a los militares con las armas y asaltos a bancos que dejaron muertos en las filas uniformadas.
Los Tratados Torrijos-Carter
En 1903 los EUA imponen un "tratado a perpetuidad" sobre el Canal de Panamá (no es cierto, el tratado "que ningún panameño firmó" fue producto de la ingenuidad de la Junta de Gobierno de la naciente nación istmeña al enviar a Washington como Embajador Extraordinario y Plenipotenciario a Phillip Bunau-Varilla, ex-Secretario Administrativo de La Compañía Francesa del Canal Interoceánico que había quebrado. El francés, que buscaba sacar provecho personal del interés estadounidense por terminar el canal, firmó con el Secretario de Estado, John Hay, la cesión que algunos historiadores dicen fue por 99 años y otros en forma perpetua. Esto no es de extrañar, porque el que sería primer Presidente de Panamá, el Dr. Manuel Amador Guerrero, era cartagenero, es decir, colombiano, y prueba de que también buscaba beneficiarse del interés de Washington es que tras la separación dada el 3 de noviembre de 1903 quedó dueño del conocido edificio "La Pollera", a la entrada de lo que se conoce en Cidad de Panamá como "Salsipuedes" y otros bienes, que no se pueden justificar con un salario de médico del Batallón Colombia). En la Zona no se permite la vivienda, movilización y/o actividades por panameños, sólo por norteamericanos o zonians. Se cuenta que en una ocasión, de adolescente, Torrijos quizó comerse un mango (fruta tropical, ¡pruébela!), en la Zona y un militar gringo no se lo permitió porque era propiedad norteamericana. Se cuenta que esta experiencia fue una de las motivaciones por las que Torrijos luchó por la soberanía del territorio panameño (la presunta anécdota es dudosa, porque los soldados estadounidenses sólo tenían jurisdicción dentro de los sitios de defensa del Canal y todo capitalino sabe que los zonians no comían los mangos ni los nísperos que abundaban en la franja canalera, así como se permitía a cualquiera cogerlos siempre y cuando no arrojara a los árboles palos ni piedras).
Sin ninguna duda, la firma de los Tratados Torrijos-Carter (septiembre de 1977) fue y es un logro extraordinario para la época del imperialismo yanqui, logrando la promesa de la devolución total de la zona del Canal a los panameños en 1999 (eso es relativo,porque la enmienda DeConcini le permite a los Estados Unidos tomar el control del Canal nuevamente cuando estimen que la seguridad de su país o del hemisferio está amenazada, así como en caso de comprobarse la administración deficiente por parte de Panamá. Incluso, el tratado le da a Estados Unidos la primera opción frente a un eventual intento panameño de cambiar el sistema de esclusas del Canal para hacer la vía a nivel del mar y ello en la praxis determina que Panamá sólo puede asociarse con alguna potencia extranjera para la empresa si antes le ofreció la opción de socio a Washington y éste rehusó participar. Es por esto que Torrijos, al regresar de la firma de los tratados canaleros, dijo al pueblo reunido en el Aeropuerto Marcos A.Gelabert, en Paitilla, que "seguíamos bajo el paraguas del Pentágono").
Torrijos no logró ver la devolución del Canal de Panamá, su más anhelado sueño y su mayor éxito a nivel nacional e internacional, ya que pierde la vida el 31 de julio de 1981, cuando viajaba en su helicóptero en el área de cerro Marta, en la provincia de Coclé, en un accidente nunca esclarecido que algunos sectores han atribuído a la Agencia Central de Inteligencia (CIA) con la presunta complicidad del entonces teniente coronel y jefe de la Inteligencia Militar panameña Manuel Antonio Noriega.
El General Manuel Antonio Noriega llegó al poder poco tiempo después del fallecimiento de Torrijos (no es cierto, llegó al generalato en 1983 tras jubilarse el general Rubén Darío Paredes. A la muerte de Torrijos, correspondía ascender automáticamente a general de brigada al coronel Florencio Flores Aguilar, Jefe de Estado Mayor de la Guardia Nacional, quien rechazó ser promovido dado que el Presidente de la Asamblea Nacional de Representantes de Corregimientos, el veragüense Víctor Corrales Núñez, se oponía por considerar que ello lesionaba la memoria de Torrijos. Ante la indecisión del coronel Flores Aguilar, Paredes asumió el mando de la Guardia Nacional como general de brigada y con su famosa frase Desde Ya clausuró el diario opositor La Prensa y apretó tuercas, con Manuel Antonio Noriega como Jefe del Estado Mayor). En la época se culpaba a Noriega de la inesperada muerte de Torrijos (y se comentaba la extraña similitud entre el "accidente del General" y el sufrido por el Presidente ecuatoriano Jaime Roldós Aguilera).
El actual Presidente de Panamá, Martín Torrijos Espino, es hijo del General Torrijos. A principios de 2005, el Lcdo. Torrijos nombró a la hija del Gral. Noriega, Sandra Noriega de Beauchamps, como miembro del cuerpo diplomático panameño acreditado en República Dominicana. Ella es casada con el hijo del general dominicano Jean Beauchamps.
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